Se tiende a pensar que, tras retirar la ortodoncia, hemos terminado con el proceso y contamos con la dentadura deseada. Pero no es así, tras terminar esa primera fase activa del procedimiento hay que colocar los retenedores de ortodoncia.
Muchos pacientes, tras llevar ortodoncia, vuelven a pedir un tratamiento porque al no respetar la fase de retención sus dientes se han movido. Los retenedores de ortodoncia son aparatos que se colocan al finalizar tu tratamiento para que los dientes no vuelvan a moverse.
Los niños, como los adultos, tendrán que llevar retenedores después de la ortodoncia. Cuanto antes mejor podrá el ortodoncista valorar la posición y la mordida de los dientes y el crecimiento de los maxilares. Según la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO), es aconsejable realizar una primera revisión a los 6 años a pesar de que el crecimiento de los dientes parezca normal a simple vista.
En Doctor Toledo hacemos todo lo posible para que los más pequeños se sientan cómodos cuando vienen a revisar la salud de sus dientes.
Cuándo se colocan
Una vez corregidas las malposiciones de las piezas dentales y concluido el tratamiento de ortodoncia interceptiva el especialista colocará, de igual manera, un aparato de retención.
Lo ideal es que, para evitar movimientos indeseados en los dientes, el especialista coloque los retenedores fijos el mismo día que retira el aparato de ortodoncia.
También ese día se tomarán modelos para realizar las férulas a medida que actuarán de retenedores removibles.
Qué tipos hay
FIJOS
Unas finas láminas de alambre trenzado que se pegan en la parte interior de los dientes impidiendo que se muevan. Es recomendable evitar alimentos duros que podrían provocar que se despeguen o se fracturen.
Se deben de llevar de por vida, pero al ir colocados en la cara interna, nadie notará que los llevas puestos, son completamente imperceptibles y muy cómodos.
REMOVIBLES
Los retenedores removibles deberás llevarlos el tiempo que indique tu ortodoncista. De manera habitual, lo ideal es que en un inicio combines el uso de ambos retenedores para, poder ir reduciendo de manera paulatina el tiempo de necesitar su uso.
Durante los primeros meses de la fase de retención, generalmente tres, solo deberás usarlos las 24 horas del día, retirándolos para comer y cepillarte los dientes. Después, su uso quedará relegado a las horas de descanso. Es aconsejable lavarlos una vez al día con agua y jabón.
Hay dos tipos:
- Retenedor essix o férula: Unas férulas transparentes realizadas a medida de la boca del paciente. Su aspecto es muy parecido a los alineadores de Invisalign, por lo que son altamente estéticos y casi imperceptible a la vista.
- Retenedor Hawley: Un aparato de resina y alambre colocado sobre los últimos molares que cuenta con un arco exterior y un paladar realizado con un material acrílico. Es el más usado y aconsejado para los niños.
Es ideal para la dentición mixta, dientes de leche y definitivos. Pero, también puede emplearse en casos de ortodoncia para adultos. Entre otros, para pacientes con una mordida muy abierta o con tendencia a ejercer presión sobre la dentición.
¿Duele llevarlos?
No sentirás ninguna molestia, no interfieren en el habla ni generan llagas o pequeñas heridas a causa del roce. No te costará adaptarte a la presencia de los aparatos de retención en la boca.
Tampoco duele su colocación y en pocas horas te acostumbrarás a ellos. No sentirás ningún dolor ni la presión típica de los aparatos de ortodoncia.
Los retenedores de ortodoncia son esenciales para garantizar la estabilidad de los resultados de los tratamientos de ortodoncia. Aquí encontrarás más información acerca de por qué son tan necesarios.