Tratamiento de ortodoncia invisible en Zaragoza

Los alineadores transparentes se han convertido en una opción popular para adultos, adolescentes y niños que quieren evitar los aparatos tradicionales, ya sea por estética o por comodidad. Son un tratamiento eficaz para personas con los dientes demasiado separados, con apiñamiento dental o con defectos de mordida.

La ortodoncia invisible funciona mediante férulas transparentes que aplican fuerzas suaves y progresivas sobre los dientes hasta colocarlos en la posición deseada. Cada alineador se cambia cada 10-15 días y la duración del tratamiento depende de la complejidad del caso. En tratamientos sencillos, el proceso puede durar solo unos meses, mientras que en casos más complejos puede extenderse hasta los dos o tres años.
Durante los primeros días de uso de cada férula, es normal notar cierta presión o molestia ligera, signo de que los dientes están respondiendo al movimiento. Sin embargo, este proceso resulta mucho más cómodo y menos doloroso que la ortodoncia con brackets metálicos, lo que convierte a los alineadores invisibles en una alternativa muy demandada por adultos y adolescentes.

Los resultados de la ortodoncia invisible pueden mantenerse toda la vida, siempre que el paciente siga las indicaciones del ortodoncista. Una vez finalizado el tratamiento con alineadores transparentes, es fundamental utilizar retenedores dentales. Estos dispositivos, fijos o removibles, ayudan a mantener los dientes en su nueva posición y evitan que vuelvan a moverse con el paso del tiempo.
Es importante recordar que los dientes, de manera natural, tienden a desplazarse debido a la edad, a la presión de la lengua o a hábitos como el bruxismo. Por eso, incluso después de haber conseguido una sonrisa alineada, será necesario mantener una rutina de revisión y uso de retenedores para conservar los resultados de forma estable y duradera.

La ortodoncia invisible, como la ortodoncia tradicional, es un tratamiento que produce progresivamente movimientos dentales hasta su correcta posición. Estos movimientos se traducen en ligeras presiones durante los primeros días del cambio de férulas o al activar los brackets. Por ello, no son considerados tratamientos dolorosos.

No obstante, una diferencia importante de la ortodoncia invisible o Invisalign es que, al no llevar brackets metálicos, evitas las posibles heridas como llagas, que sí pueden ocasionar dolor y escozor. Además, las férulas, personalizadas, transparentes y flexibles, permiten aportar una mayor estética y con ello nos ayudan a mejorar nuestro aspecto con respecto a la ortodoncia con brackets.

Las férulas están moldeadas a la perfección en base a los dientes de cada persona y están diseñadas para llevarlas poco a poco a su lugar correcto, mientras permiten sonreír sin complejos. Este avance se logra después de crear diversos moldes, a medida que avanza el tratamiento, para llevar el control del desplazamiento dental.

A través de un escáner intraoral o de moldes tradicionales, se obtiene el modelo digitalizado de la boca. Tras un correcto estudio fotográfico, radiográfico y clínico, nuestros doctores elaboran la secuencia de movimientos personalizados para cada paciente. Desde el principio, tendremos la oportunidad de ver cómo terminará nuestra boca.

Además, este método tampoco rompe la parte interna de la boca, ya que el producto es completamente liso, sin protuberancias que puedan ocasionar molestias en la boca. Y sumado a todo esto, es completamente removible, lo que permite una limpieza normal de toda la boca y de la ortodoncia. Esto también ayuda a comer, ya que los dientes no pueden masticar bien con la lámina puesta.

Con Invisalign no hay ningún alimento restringido. Es decir, puedes comer todo lo que quieras siempre y cuando retires primero los alineadores. Por otro lado, es recomendable retirar los alineadores si vas a consumir bebidas que tengan una coloración oscura como el café, el vino tinto o los refrescos, porque decoloran las férulas y pierden transparencia, haciendo también que pierdan su funcionalidad estética.

Es muy importante que las férulas estén puestas 22 horas al día. Por tanto, si vas a estar mucho tiempo consumiendo este tipo de bebidas, es preferible que no te quites los alineadores y, una vez que hayas terminado de beber, te cepilles los dientes y laves muy bien las férulas.

Al igual que ocurre con las bebidas oscuras, el tabaco mancha y decolora las férulas, por lo que pierden también sus propiedades estéticas. Es recomendable no fumar mientras se llevan los alineadores puestos, pero si se fuma de manera constante, es mejor no quitárselos porque el tratamiento pierde eficacia si se restan horas de uso.

Si fumas con la ortodoncia invisible puesta, deberás ser muy minucioso con la limpieza de los alineadores cada vez que los retires.

El tabaco es perjudicial para los alineadores, pero también puede provocar enfermedades bucodentales como gingivitis o periodontitis y estropear la estética de los dientes, ya que provoca manchas y tinciones, entre otros.

Un paciente con periodontitis controlada puede llevar ortodoncia invisible siempre que esté bajo tratamiento y supervisión profesional. Los alineadores transparentes ejercen una fuerza más suave que los brackets tradicionales, lo que los convierte en una opción adecuada para personas con encías sensibles o problemas periodontales. Aun así, siempre se recomienda una valoración conjunta con el periodoncista para conocer la gravedad del caso antes de iniciar el tratamiento.

En cuanto al bruxismo, los alineadores invisibles pueden ayudar a disminuir el hábito nocturno, ya que la férula actúa como una barrera entre los dientes y reduce el contacto interdental. Esto no solo protege las piezas dentales, sino que también aporta mayor comodidad durante la noche.

Aunque la ortodoncia invisible ofrece grandes ventajas, no siempre es la mejor opción en todos los casos. Existen situaciones en las que los alineadores transparentes tienen limitaciones frente a los aparatos fijos tradicionales. Estos son algunos ejemplos en los que puede no ser recomendable este tratamiento:

• Sobremordida severa: mientras que las sobremordidas leves o moderadas pueden tratarse, los casos más graves suelen requerir brackets u otros sistemas.
• Forma de los dientes: piezas demasiado cortas o con forma irregular pueden impedir que los alineadores se ajusten correctamente.
• Posición dental muy girada: si un diente está excesivamente rotado, los alineadores invisibles pueden no lograr alinearlo de manera adecuada.
• Espacios grandes entre dientes: los diastemas pequeños se corrigen fácilmente, pero las separaciones muy amplias requieren otros métodos.
• Movimientos verticales (intrusión y extrusión): los alineadores no son efectivos para desplazar dientes hacia arriba o hacia abajo.
• Trabajos dentales previos: pacientes con puentes fijos u otros tratamientos protésicos pueden no ser candidatos.
• Caries o enfermedad periodontal activa: antes de iniciar la ortodoncia invisible es fundamental tratar cualquier problema de encías o dientes para evitar complicaciones.

Los alineadores transparentes funcionan muy bien en la mayoría de los casos, pero requieren una correcta evaluación profesional para garantizar que son la mejor solución para cada paciente.

No existe un límite de edad para iniciar un tratamiento con ortodoncia invisible. Niños, adolescentes y adultos pueden beneficiarse de este sistema siempre que sus dientes y encías estén en buen estado.

• En niños pequeños suele emplearse como parte de una ortodoncia interceptiva, que guía el crecimiento de los huesos y facilita la erupción de los dientes permanentes.
• En adolescentes y adultos, los alineadores transparentes se adaptan a las necesidades estéticas y funcionales de cada paciente.

Lo más importante no es la edad, sino el compromiso. Para que la ortodoncia invisible sea eficaz, el paciente debe llevar los alineadores al menos 22 horas al día y seguir las recomendaciones del ortodoncista. Con la supervisión adecuada, este tratamiento puede ofrecer excelentes resultados en cualquier etapa de la vida.

Si estás pensando en utilizar alineadores transparentes, puedes hacerte algunas preguntas para saber si este tratamiento es adecuado para ti:

• ¿Tengo un problema de apiñamiento, separación dental o algún tipo de mordida?
• ¿Me sentiría más cómodo con un tratamiento discreto en lugar de brackets metálicos?
• ¿Estoy dispuesto a llevar los alineadores el número de horas necesarias cada día (unas 22 horas)?
• ¿Voy a ser constante en el cuidado y la limpieza de mis férulas?
• En caso de adolescentes: ¿se comprometerán a usarlos correctamente y a mantenerlos en buen estado?

La ortodoncia invisible puede utilizarse en una gran variedad de casos: apiñamientos, diastemas (espacios entre dientes) y diferentes tipos de mordida leve o moderada. Es especialmente recomendable para quienes buscan un tratamiento estético, cómodo y poco visible, sin renunciar a la eficacia de la ortodoncia.

Antes de tomar una decisión, lo mejor es hablar con un ortodoncista especializado. Tras un estudio detallado de tu caso, podrá recomendarte el tipo de ortodoncia más adecuado y resolver todas tus dudas para que tengas claros los pros y los contras de cada opción.